La historia de la Frauenkirche en Dresde es tan agitada como conmovedora. El edificio construido en el siglo XVIII ardió por completo y se desmoronó en febrero de 1945, después de los devastadores ataques aéreos a la ciudad. Durante 48 años, la montaña de escombros en la plaza Neumarkt se mantuvo como un monumento conmemorativo contra la guerra y la destrucción. Desde 1982 se consideró, además, un símbolo del movimiento pacifista de Alemania del Este y de la protesta no violenta. Entre 1993 y 2005, el edificio barroco con su característica cúpula fue reconstruido, aprovechando los materiales originales que aún eran utilizables. Para la financiación del proyecto se contó con el apoyo de donativos del mundo entero. Desde su inauguración, la «nueva» Frauenkirche es un símbolo de la paz y la reconciliación. La parte inferior de la iglesia de piedra arenisca, construida en un solar relativamente pequeño, posee una forma octogonal. La fachada clara está interrumpida por algunas piedras originales oscuras, que fueron colocadas en los lugares que ocupaban anteriormente. De esta manera se logra enlazar lo antiguo y lo nuevo: el pasado como parte del futuro. También la cúpula está hecha por completo de piedra arenisca. Con una altura de 24 metros y un diámetro de 26 metros, pesa más de 12 000 toneladas. La Frauenkirche debe su sobrenombre de «campana de piedra» a la forma única de la cúpula, con su parte inferior cóncava.
La iluminación del edificio barroco con cúpula planteó un reto especial. «La fuerza imaginaria para la paz y la reconciliación viene del interior y proyecta su luz al mundo», afirma el proyectista Walter Bamberger, explicando el principio de que la iglesia debe resplandecer principalmente desde dentro. De esta manera, esta luz también forma parte de la iluminación exterior y, como tal, se debía incluir en la planificación.
➀ 77652 Los proyectores compactos con distribución de la intensidad lumínica intensiva fueron montados y alineados en las buhardillas de la cúpula por medio del trabajo vertical.
➁ 77434 · 84528 Proyectores de superficie con distribución de la intensidad lumínica en forma de banda y proyectores de potencia con distribución de la intensidad lumínica simétrica extensiva permiten conseguir la iluminación deseada de la cúpula
La puesta en escena en la oscuridad de la Frauenkirche de Dresde se logró teniendo en cuenta un gran número de parámetros. La complicada variedad de la planificación de la iluminación fue estudiada por profesionales acreditados: el proyectista Walter Bamberger es un especialista muy solicitado para tareas especiales. En estrecha colaboración con Thomas Gottschlich, el arquitecto principal del departamento de arquitectura de la iglesia de Dresde, se consiguió realzar con la iluminación los significativos detalles históricos que representa la Frauenkirche.
En la parte inferior del edificio, la puesta en escena de la iglesia se sirve del alumbrado público normal. Esta luz también parece iluminar la cúpula. Sin embargo, en realidad la luz para el exterior procede, entre otros, de diferentes proyectores BEGA.
Thomas Gottschlich, arquitecto principal del departamento de arquitectura de la iglesia de Dresde
La planificación planteó algunos retos importantes, ya que la ubicación de las fuentes de luz quedaba predeterminada por motivos del diseño. «La conducción de la luz se elige de tal manera que la arquitectura y sus elementos se pueden percibir de manera muy detallada y plástica», dice Walter Bamberger.
La luminotecnia tuvo que adaptarse y tener en cuenta los diferentes grados de luminosidad de la fachada en los distintos niveles en los que se colocaron las luminarias. También con la superficie más oscura de las piedras históricas había que conseguir el resultado original. «Se requería una densidad lumínica similar o más luz en la dirección correcta», explican los proyectistas. El resultado es un logro especial de la iluminación de fachadas con proyectores:
Proyectista Walter Bamberger
Sin embargo, según explica Bamberger, la luminosidad se mantiene discreta, dado que se pretende que las personas comprendan el mensaje de la luz que resplandece desde el interior. A la vista de la necesidad de evitar elevados costes posteriores, la calidad de las luminarias y su extraordinaria durabilidad también fueron criterios importantes a la hora de elegir los productos. Los responsables consideran que esta es una de las características que marcan la fiabilidad de un fabricante de alta gama.
El fenómeno «Frauenkirche» también significa que, en la realización del concepto de iluminación, se tuvo que recurrir a escaladores industriales para trabajar en posiciones de difícil acceso a una altura de más de 50 metros.
En las cuatro torres de escaleras, los proyectores BEGA cumplen su función con seguridad a una altura de aproximadamente 44 metros.
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